Effectiveness and safety of inverted shoulder prosthesis arthropathy of the rotator cuff.
2011
CIRUGÍA ORTOPÉDICA Y TRAUMATOLOGÍA
TEC. SANITARIA. EXCLU. MED.
INFORMES DE EVALUACIÓN
- + Año
-
2011
- + Áreas de Conocimiento
-
CIRUGÍA ORTOPÉDICA Y TRAUMATOLOGÍA
- + Tipo Tecnología
-
TEC. SANITARIA. EXCLU. MED.
- + Línea de Producción
-
INFORMES DE EVALUACIÓN
Con el objetivo de determinar la efectividad y la seguridad de la prótesis invertida de hombro (PIH) en la artropatía del manguito rotador, se realizó una revisión sistemática de la literatura. Los autores concluyeron que la colocación de una PIH aumenta la movilidad de la articulación afectada y sus parámetros clínicos, incluyendo la satisfacción de los pacientes. Aun así, la colocación de una PIH es una cirugía muy agresiva con una amplia variedad en el número y gravedad de complicaciones o secuelas posquirúrgicas. Son necesarios más estudios con comparadores adecuados poder sustentar recomendaciones acerca de su utilización rutinaria.
OBJETIVOS
Determinar la efectividad y la seguridad de la prótesis invertida de hombro y evaluar si permite mejorar aspectos relacionados con la calidad de vida, desciende el número de eventos adversos a corto, medio o largo plazo, o si reduce el tiempo de rehabilitación, respecto a otro tipo de terapias.
METODOLOGÍA
Se ha realizado una revisión sistemática de la literatura. Los criterios de inclusión fueron: población general diagnosticada de artropatía de hombro con lesión del manguito rotador, intervención (prótesis invertida de hombro) y resultados de efectividad y seguridad.
RESULTADOS
Entre un total de 206 referencias se localizaron 36 documentos que fueron leídos a texto completo. Finalmente se seleccionaron 13, todos ellos trabajos originales que describieron series de casos, salvo 1 que fue una serie de casos y controles. Estudio de casos y controles: Muestra formada por 66 pacientes (54,5% mujeres y 45,5% hombres), Se formaron dos grupos: A (con artroscopia previa, N: 29) y B (sin artroscopia, N: 39) con el objetivo de evaluar el resultado de la inserción de PIH. La edad media para ambos fue de 66 años (52-84). El brazo más intervenido fue el derecho. La PIH utilizada fue la Delta (DePuy, France) y con abordaje deltopectoral en el 100%. El 85% fueron cementadas. La duración de la inmovilización hasta el comienzo de los movimientos pasivos fue de 1 semana. En ambos grupos el seguimiento realizado fue de aproximadamente 42 meses (24-96). Todas las escalas empleadas, antes y después de la cirugía, mostraron un aumento significativo de sus valores en ambos grupos (p<0.05). No hubo diferencias estadísticamente significativas entre los grupos comparados para ninguna de las escalas. Los parámetros de movilidad aumentaron en relación a la elevación y abducción (p<0.05) pero sin diferencias estadísticamente significativas entre los dos grupos, El rango de rotación externa disminuyó tras la intervención (p=0,098) en el grupo previamente intervenido y presentó un valor de p=0,12 en el grupo sin intervención previa. Se identificó una parestesia parcial del nervio radial con remisión espontánea a los 63 meses (grupo con intervención previa), 3 pérdidas de componente humeral (grupo con intervención previa) que necesitaron revisión quirúrgica y 4 luxaciones del componente glenoideo (grupo sin intervención previa) que acabaron en conversión a hemiartroplastia. Series de casos: Las 12 series incluyeron entre 45 y 96 pacientes, salvo dos de ellas que incluyeron 28 y 232, con edades medias comprendidas entre los 66-79 años (rango 23-94). Se realizó mayor número de intervenciones sobre el brazo dominante (75-66%). Los tipos de lesiones que presentaba la población variaron de un estudio a otro pero la AMR estuvo presente en todos. Se realizaron estudios radiológicos y clínicos prequirúrgicos. El abordaje más empleado fue el deltopectoral y la prótesis más utilizada la Delta (DePuy, France). Existió seguimiento en todos los trabajos, con una duración media de 35,7 meses (3-94). Las distintas escalas empleadas mostraron una mejora en las características clínicas de los pacientes. En las escalas que presentaron datos desagregados por patologías, éstos fueron estadísticamente significativos al igual que en los datos globales. Los resultados de movilidad fueron estadísticamente significativos para elevación activa y pasiva, rotación externa activa y abducción activa. Por grupos de patologías los resultados fueron iguales salvo en el caso de revisión de la intervención o secuelas de fracturas donde no se experimentaron cambios en el rango de movilidad de la abducción activa. En un estudio se analizó la supervivencia de la prótesis con resultados del 91,3% a los 5 años, Como complicaciones se encontraron hematomas en el 8,13% (1,04-20,8%), diferentes tipos de lesiones nerviosas, infecciones con una media del 5,2% (1,04-10,4%), aflojamiento del componente glenoideo con porcentaje medio de 8,4% (1,3-5,1), aflojamiento humeral, dislocaciones superolaterales (7 pacientes, rango de 3-4), fracturas de acromion, coracoides, gleinoides, húmero y escápula, La aparición de muescas escapulares se produjo como media en el 75,2% de pacientes afectados (63,6-87%), El porcentaje de reintervención varió entre el 3,1-25,4%, llevándose a cabo 7 conversiones (6 hemiartroscopias).
CONCLUSIONES
La colocación de una PIH es una cirugía muy agresiva que requiere la participación de un cirujano ortopeda con gran experiencia. Su utilización aumenta la movilidad de la articulación afectada y sus parámetros clínicos, contando con la satisfacción de los pacientes que se benefician de ella. Aun así, existe una amplia variedad en el número y gravedad de complicaciones o secuelas posquirúrgicas. Se sigue necesitando mayor investigación experimental con uso de comparadores para poder sustentar recomendaciones acerca de su utilización rutinaria.
Determinar la efectividad y la seguridad de la prótesis invertida de hombro y evaluar si permite mejorar aspectos relacionados con la calidad de vida, desciende el número de eventos adversos a corto, medio o largo plazo, o si reduce el tiempo de rehabilitación, respecto a otro tipo de terapias.
METODOLOGÍA
Se ha realizado una revisión sistemática de la literatura. Los criterios de inclusión fueron: población general diagnosticada de artropatía de hombro con lesión del manguito rotador, intervención (prótesis invertida de hombro) y resultados de efectividad y seguridad.
RESULTADOS
Entre un total de 206 referencias se localizaron 36 documentos que fueron leídos a texto completo. Finalmente se seleccionaron 13, todos ellos trabajos originales que describieron series de casos, salvo 1 que fue una serie de casos y controles. Estudio de casos y controles: Muestra formada por 66 pacientes (54,5% mujeres y 45,5% hombres), Se formaron dos grupos: A (con artroscopia previa, N: 29) y B (sin artroscopia, N: 39) con el objetivo de evaluar el resultado de la inserción de PIH. La edad media para ambos fue de 66 años (52-84). El brazo más intervenido fue el derecho. La PIH utilizada fue la Delta (DePuy, France) y con abordaje deltopectoral en el 100%. El 85% fueron cementadas. La duración de la inmovilización hasta el comienzo de los movimientos pasivos fue de 1 semana. En ambos grupos el seguimiento realizado fue de aproximadamente 42 meses (24-96). Todas las escalas empleadas, antes y después de la cirugía, mostraron un aumento significativo de sus valores en ambos grupos (p<0.05). No hubo diferencias estadísticamente significativas entre los grupos comparados para ninguna de las escalas. Los parámetros de movilidad aumentaron en relación a la elevación y abducción (p<0.05) pero sin diferencias estadísticamente significativas entre los dos grupos, El rango de rotación externa disminuyó tras la intervención (p=0,098) en el grupo previamente intervenido y presentó un valor de p=0,12 en el grupo sin intervención previa. Se identificó una parestesia parcial del nervio radial con remisión espontánea a los 63 meses (grupo con intervención previa), 3 pérdidas de componente humeral (grupo con intervención previa) que necesitaron revisión quirúrgica y 4 luxaciones del componente glenoideo (grupo sin intervención previa) que acabaron en conversión a hemiartroplastia. Series de casos: Las 12 series incluyeron entre 45 y 96 pacientes, salvo dos de ellas que incluyeron 28 y 232, con edades medias comprendidas entre los 66-79 años (rango 23-94). Se realizó mayor número de intervenciones sobre el brazo dominante (75-66%). Los tipos de lesiones que presentaba la población variaron de un estudio a otro pero la AMR estuvo presente en todos. Se realizaron estudios radiológicos y clínicos prequirúrgicos. El abordaje más empleado fue el deltopectoral y la prótesis más utilizada la Delta (DePuy, France). Existió seguimiento en todos los trabajos, con una duración media de 35,7 meses (3-94). Las distintas escalas empleadas mostraron una mejora en las características clínicas de los pacientes. En las escalas que presentaron datos desagregados por patologías, éstos fueron estadísticamente significativos al igual que en los datos globales. Los resultados de movilidad fueron estadísticamente significativos para elevación activa y pasiva, rotación externa activa y abducción activa. Por grupos de patologías los resultados fueron iguales salvo en el caso de revisión de la intervención o secuelas de fracturas donde no se experimentaron cambios en el rango de movilidad de la abducción activa. En un estudio se analizó la supervivencia de la prótesis con resultados del 91,3% a los 5 años, Como complicaciones se encontraron hematomas en el 8,13% (1,04-20,8%), diferentes tipos de lesiones nerviosas, infecciones con una media del 5,2% (1,04-10,4%), aflojamiento del componente glenoideo con porcentaje medio de 8,4% (1,3-5,1), aflojamiento humeral, dislocaciones superolaterales (7 pacientes, rango de 3-4), fracturas de acromion, coracoides, gleinoides, húmero y escápula, La aparición de muescas escapulares se produjo como media en el 75,2% de pacientes afectados (63,6-87%), El porcentaje de reintervención varió entre el 3,1-25,4%, llevándose a cabo 7 conversiones (6 hemiartroscopias).
CONCLUSIONES
La colocación de una PIH es una cirugía muy agresiva que requiere la participación de un cirujano ortopeda con gran experiencia. Su utilización aumenta la movilidad de la articulación afectada y sus parámetros clínicos, contando con la satisfacción de los pacientes que se benefician de ella. Aun así, existe una amplia variedad en el número y gravedad de complicaciones o secuelas posquirúrgicas. Se sigue necesitando mayor investigación experimental con uso de comparadores para poder sustentar recomendaciones acerca de su utilización rutinaria.
OBJECTIVES
Determine the effectiveness and safety of the reverse shoulder prosthesis and assess whether or not it facilitates improvements in aspects such as quality of life, decrease in adverse events in the short, medium or long term, or if it reduces rehabilitation time in comparison with other therapies.
METHODOLOGY
A systematic review of the literature has been carried out. The inclusion criteria were general population diagnosed with shoulder arthropathy with rotator cuff injury, intervention (reverse shoulder prosthesis) and results of effectiveness and safety.
RESULTS
Of a total with 206 references, 36 documents were located and read in full. Finally, 13 were selected; all were original works that described a series of cases, except one that was a series of cases and controls.
Case-control Studies. Sample composed of 66 patients (54.5% women and 45.5% men). Two groups were created A (with prior arthroscopy, N 29) and B (with arthroscopy, N 39) to assess the results of the insertion of reverse shoulder prosthesis. The average age for both was 66 years (52- 84). The most intervened arm was the right arm. The reverse shoulder prosthesis used was the Delta (DePuy, France) and the deltopectoral approach in 100% of the cases. 85% of the cases were cemented. The duration of immobilization until the commencement of passive movements was one (1) week. In both groups, the follow up was approximately 42 months (24-96). All scales before and after surgery showed a significant increase in the values in both groups (p<0.05). There were no significant differences between the groups compared for any of the scales. The parameters for mobility increased in terms of elevation and abduction (p<0.05) but without statistically significant differences between the groups. The external rotation range decreased after the intervention (p=0.098) in the group intervened previously and presented a value of p=0.12 in the group without prior intervention. Partial paresthesia of the radial nerve was identified with spontaneous remission after 63 months (from group with prior intervention), 3 humeral bone loss (from group with prior intervention) that needed review surgery and 4 dislocation of the glenoid component (group without previous intervention) which converted to hemiarthroplasty.
Case series. The 12 series included between 45 and 96 patients, except two that included 28 and 232, with ages between 66-79 years (range 23-94). A greater number of interventions were performed on the dominant arm (75-66%). The types of injuries seen in the population varied in the study but the rotator cuff was found in all. Radiological and pre-surgical studies were performed. The deltopectoral approach was preferred and the Delta (DePuy, France) prosthesis was used most. There was follow-up of all works, with an average duration of 35.7 months (3-94). The various scales used showed improvement in the clinical characteristics of the patients. In the scales presenting data broken down by pathology, these were statistically significant, as was the global data. The mobility results were statistically significant for active and passive elevation, active external rotation and active abduction. In terms of groups based on pathologies, the results were the same, except in the case of reviewing the intervention or the consequences of fractures, in which case, no changes were experienced in the mobility range of the active abduction. In one study, the survival of the prosthesis was analyzed with 91.3% results after five years. In terms of complications, hematomas were found in 8.13% (1.04- 20.8%), various types of nerve injuries, infections with an average of 5.2% (1.04-10.4%), loosening of the glenoid component with an average rate of 8.4% (1.3-5.1), loosening of the humeral, superolateral dislocations (7 patients, range of 3-4), fractures of the acromion, coracoids, humerus and scapula. The appearance of scapular notching was seen on average in 75.2% of the patients affected (63.6-87%). The percentage of reintervention varied between 3.1-25.4%, having undertaken seven conversions (6 hemiarthroscopies).
CONCLUSIONS
The placement of reverse shoulder prosthesis is an extremely aggressive surgical procedure that requires the participation of a well experienced orthopedic surgeon. Its usage increases mobility of the affected joint and clinical parameters, counting on the satisfaction of the patients who benefit from this procedure. Even so, there is an extensive variety in the number and seriousness of the complications or post-surgical complications. Further experimental research is necessary in the use of comparisons to sustain recommendations about routine use.
Determine the effectiveness and safety of the reverse shoulder prosthesis and assess whether or not it facilitates improvements in aspects such as quality of life, decrease in adverse events in the short, medium or long term, or if it reduces rehabilitation time in comparison with other therapies.
METHODOLOGY
A systematic review of the literature has been carried out. The inclusion criteria were general population diagnosed with shoulder arthropathy with rotator cuff injury, intervention (reverse shoulder prosthesis) and results of effectiveness and safety.
RESULTS
Of a total with 206 references, 36 documents were located and read in full. Finally, 13 were selected; all were original works that described a series of cases, except one that was a series of cases and controls.
Case-control Studies. Sample composed of 66 patients (54.5% women and 45.5% men). Two groups were created A (with prior arthroscopy, N 29) and B (with arthroscopy, N 39) to assess the results of the insertion of reverse shoulder prosthesis. The average age for both was 66 years (52- 84). The most intervened arm was the right arm. The reverse shoulder prosthesis used was the Delta (DePuy, France) and the deltopectoral approach in 100% of the cases. 85% of the cases were cemented. The duration of immobilization until the commencement of passive movements was one (1) week. In both groups, the follow up was approximately 42 months (24-96). All scales before and after surgery showed a significant increase in the values in both groups (p<0.05). There were no significant differences between the groups compared for any of the scales. The parameters for mobility increased in terms of elevation and abduction (p<0.05) but without statistically significant differences between the groups. The external rotation range decreased after the intervention (p=0.098) in the group intervened previously and presented a value of p=0.12 in the group without prior intervention. Partial paresthesia of the radial nerve was identified with spontaneous remission after 63 months (from group with prior intervention), 3 humeral bone loss (from group with prior intervention) that needed review surgery and 4 dislocation of the glenoid component (group without previous intervention) which converted to hemiarthroplasty.
Case series. The 12 series included between 45 and 96 patients, except two that included 28 and 232, with ages between 66-79 years (range 23-94). A greater number of interventions were performed on the dominant arm (75-66%). The types of injuries seen in the population varied in the study but the rotator cuff was found in all. Radiological and pre-surgical studies were performed. The deltopectoral approach was preferred and the Delta (DePuy, France) prosthesis was used most. There was follow-up of all works, with an average duration of 35.7 months (3-94). The various scales used showed improvement in the clinical characteristics of the patients. In the scales presenting data broken down by pathology, these were statistically significant, as was the global data. The mobility results were statistically significant for active and passive elevation, active external rotation and active abduction. In terms of groups based on pathologies, the results were the same, except in the case of reviewing the intervention or the consequences of fractures, in which case, no changes were experienced in the mobility range of the active abduction. In one study, the survival of the prosthesis was analyzed with 91.3% results after five years. In terms of complications, hematomas were found in 8.13% (1.04- 20.8%), various types of nerve injuries, infections with an average of 5.2% (1.04-10.4%), loosening of the glenoid component with an average rate of 8.4% (1.3-5.1), loosening of the humeral, superolateral dislocations (7 patients, range of 3-4), fractures of the acromion, coracoids, humerus and scapula. The appearance of scapular notching was seen on average in 75.2% of the patients affected (63.6-87%). The percentage of reintervention varied between 3.1-25.4%, having undertaken seven conversions (6 hemiarthroscopies).
CONCLUSIONS
The placement of reverse shoulder prosthesis is an extremely aggressive surgical procedure that requires the participation of a well experienced orthopedic surgeon. Its usage increases mobility of the affected joint and clinical parameters, counting on the satisfaction of the patients who benefit from this procedure. Even so, there is an extensive variety in the number and seriousness of the complications or post-surgical complications. Further experimental research is necessary in the use of comparisons to sustain recommendations about routine use.